Sobre la Modern Gallery

La Modern Gallery es un proyecto dedicado a la promoción de las artes y las culturas mexicanas y universales, contemporáneas e históricas. A diferencia de las galerías puramente comerciales, no nos interesa jugar mecánicamente el juego de compra y venta, sino promover el gran arte, el que muestra innovación, creatividad, el que expresa las emociones verdaderas y sin censura, el que osa desafiar lo establecido y el conformismo de la sociedad, el arte revolucionario que critica el presente y sueña con el mundo del futuro.

Nuestra galería puede que sea comercial, pero nuestro arte no lo será, este será osado y revolucionario. Esto podría asustar a algunas personas, especialmente a las bendecidas con poder y fortuna, pero tal sería un craso error. El arte más interesante, más relevante, más impactante, y más perdurable, es el que se atreve a desafiar todo, incluyendo el status quo, la moral, las modas, y las creencias dogmáticas. El arte conformista no puede llegar a ser más que propaganda, cursilería o adulación; el arte rebelde es el que se torna clásico, el que inspira al espectador a cambiar el mundo.

Así, tanto para el espectador que sinceramente ama el arte, como para el inversionista inteligente, solo este arte rebelde es el que tiene algún valor: el tiempo con sus años esfumará los colores de la pintura comercial, pero no del arte vanguardista y rebelde, porque la gente misma lo recordará y preservará. Y el valor de una pintura genérica comercial será ínfimo a lado del de la obra que en verdad tocó el corazón de la gente.

Por eso, en la Modern Gallery no solo negociamos con obras de arte, sino que las hacemos conocidas, se las damos al mundo, para que las use, las adopte, las reúse, las absorba, las abuse… Y así las obras de arte no solo aumenten su valor comercial, sino que logran un cometido mucho más trascendental: ser parte relevante de la experiencia estética de la humanidad.

Con un poco de suerte, cuando la farsa del capitalismo hubiere terminado, las obras de esta galería seguirán siendo usadas, reusadas y abusadas, y entonces sabremos que este proyecto habrá tenido algún sentido.

Si usted quiere obras de moda, carísimas e ininteligibles, que nadie puede explicar por qué valen tanto, vaya a la galería esnob más cercana a su domicilio… Pero si quiere algo que en verdad intenta ser significativo y trascendental, bienvenido, está en el lugar adecuado. Aquí no solo hay valor, aquí hay arte.